La época navideña es una de las más importantes para muchos colombianos, y por eso muchos buscamos hacer de esa fecha un recuerdo inolvidable para nuestra familia. En el país se estima que más o menos el 70% de los Colombianos tiene vacaciones tanto de estudio (colegios y universidades) como de trabajo (ya que muchas empresas realizan sus vacaciones colectivas).
Las fiestas decembrinas suelen poner a prueba nuestra organización financiera, todos queremos ser generosos, pero si nos excedemos en gastos como regalos, comida y fiesta, podemos perder hasta el último peso de la prima y los ahorros que hayamos logrado en el resto del año.
Cómo salir bien librado de las festividades de fin de año
En vez de endeudarse en exceso o terminar agobiado el resto del año por la cantidad de gastos que representó esta temporada de descanso, tenga en cuenta los siguientes consejos que le pueden ayudar a empezar el año nuevo con salud, prosperidad y algo de saldo en su cuenta:
–
- Organice su presupuesto. Una vez descontados sus gastos fijos y variables del mes, además de la porción de su ingreso que ahorrará, puede determinar cuánto dinero tiene disponible para estas festividades. Lo prudente en este momento es organizar este mini-presupuesto navideño, comparando su dinero disponible con la suma de todos los gastos en los que incurrirá (tiquetes, alimentación, recreación, regalos), así podrá determinar si sobra o debe hacer ajustes para no excederse.
– - Compre con anticipación.Dejar las compras para último día es bastante común, pero hacerlo le representa, además precios exagerados, filas eternas en los centros comerciales, incluso puede que ya no encuentre lo que busca. Realizar compras con anticipación le permite poder escoger, comparar y ahorrar.
– - Compre por internet. Con este método, no sólo se ahorrará el dolor de cabeza que representa en algunas ocasiones las compras navideñas como lo mencionamos en el punto anterior, sino que también puede encontrar lo que busca a menor precio y desde la comodidad de su hogar.
– - Planee sus vacaciones con anticipación. En muchas ocasiones, por los afanes diarios la única solución es improvisar. Sin embargo, hacer esto le puede ocasionar gastos mayores en el hospedaje, alimentación (que incluye el tiempo de estadía), gasolina/transportes.