Lo ideal sería que en nuestras vacaciones pudiéramos viajar y descubrir nuevos lugares, personas y culturas, pero sabemos que muchas veces no contamos con los recursos para hacerlo. Así que, si en tus últimas vacaciones, ni tu familia pudieron hacerlo, entonces toma atenta nota a las recomendaciones que te presentamos para que a fin de año disfrutes del sol y de la playa.
Siempre es mejor anticiparse
Lo primero que debes hacer es planificar el viaje, es decir, escoger el lugar donde quieres estar, las personas con quien piensas ir y cuánto tiempo se van a quedar. Esto lo debes hacer con anticipación (Varios meses si es posible). Tener claro el itinerario hace una gran diferencia en cuanto a gastos se refiere, ya que al contemplarlos se pueden agregar o eliminar actividades.
Ahora sí, con el panorama más despejado, ya puedes empezar a hacer cuentas del dinero que vas a necesitar y del tiempo que te tomará ahorrarlo. Recuerda que cuando nos proponemos la meta de ahorrar para algún fin este tiene que ser concreto y alcanzable.
A partir de haber realizado esta tarea, podrás decidir si el viaje lo harás en bus o en avión. Si piensas viajar en avión, recuerda que entre más rápido compres los tiquetes más económicos te saldrán. Analiza bien si puedes reemplazar el hotel por una casa de un familiar o de un amigo, así puedes ahorrar aún más.
Y así empiezas a ajustar tu presupuesto a las necesidades. Es importante que tus gastos no excedan tus posibilidades reales de pago.
Nunca te olvides de los imprevistos
Pese a que hayas organizado todo con dedicación, recuerda que a veces surgen las emergencias, así que destina del total de tu presupuesto disponible un 10% para alguna eventualidad.
Supongamos que realizarás un viaje y el presupuesto es de $3’500.000; así que debes destinar $350.000 para un probable imprevisto. Si al final no lo gastas, podrás ahorrarlos o comprarte algo.
Dinero plástico, siempre a la mano
Lo mejor es que el dinero que destines para las vacaciones lo tengas consignado en una entidad financiera y que por medio de la tarjeta débito realices tus compras en cualquier establecimiento comercial.
Otra opción por la que puedes optar es por la de ser usuario de una tarjeta de crédito, una alternativa que, usándola inteligentemente, se convierte en una excelente aliada para afrontar imprevistos y emergencias en las vacaciones.
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Estos medios de pago son una de las formas más seguras de cuidar tus recursos porque evitan que cargues con grandes cantidades dinero en efectivo ya que en época vacacional las personas son más susceptibles a ser víctimas de atracos porque infortunadamente los delincuentes están siempre al acecho.
Esperamos que ahora sí puedas empezar a planificar tu viaje y te tomes un merecido descanso conociendo nuevos lugares y viviendo experiencias divertidas. Si quieres conocer otros tips de ahorro te invitamos a que explores nuestro blog con contenidos útiles que te ayudarán a lograr tu meta.