Con estos siete sencillos consejos podrá hacer una compra más inteligente y eficaz.
Ir al supermercado con lista en mano es una alternativa, pero solamente es efectiva si se sigue al pie de la letra. La lista ayuda a identificar aquello que se necesita y lo que no..
Compruebe el precio unitario (por kilo, litro, unidad) que aparece en la etiqueta de los productos porque es una guía útil para determinar costo- cantidad. A veces no siempre lo que viene en tamaño familiar resulta más barato que el precio unitario.
Conserve los tiquetes de compras anteriores para identificar si han subido o bajado los precios, además de ayudar a ajustar el presupuesto, sirve para comparar los valores de los productos en otros lugares.
Las marcas propias o blancas han sido puestas en el mercado con el fin de ayudarle a ahorrar al consumidor y son una buena alternativa para que el dinero rinda, sin embargo, es necesario compararlas con otras marcas en función de la calidad.
Evite comprar productos listos para el consumo, como por ejemplo fruta picada en recipientes, porque se corre el riesgo de no priorizar su gasto y se perderá.
Hay que aprender a identificar las fechas de vencimiento, procure que en caso de productos lácteos o de panadería superen los 15 días de expiración.
Aunque las compras a veces se convierten en un plan familiar hay que dejar en claro que cualquier exceso de gasto podrá afectar la economía del hogar. Es importante que todos los miembros de su familia conozcan sus planes financieros y se sientan parte de ellos; así tendrán incentivos para ahorrar y ajustar sus patrones de gasto.