Cuando empezamos a formar nuestra vida financiera y crediticia existe una pregunta que nadie puede respondernos: ¿Cuántas cuentas bancarias debería tener? ¿Dos? ¿Tres? ¿Cuándo deja de ser sano para mi bolsillo? No se preocupe, antes de que se abrume con preguntas en Saber Más, Ser Más le ayudamos respondiendo esa pregunta.
Le interesa: Cuentas de ahorro programado, más cerca a nuestros sueños.
Lo que debe evaluar
Solemos abrir o adquirir varias cuentas bancarias a medida que nuestras finanzas se vuelven más complejas –a veces difíciles de administrar –, y es natural que cuando llegamos a ese punto nos preguntamos una y otra vez cuántas cuentas bancarias realmente necesitamos.
Claro, siempre que tenga un propósito en mente para cada cuenta, no debería ser un problema tener variedad de cuentas bancarias. De hecho, es casi inevitable para muchas personas. Algunos de estos motivos pueden ser:
Para planear presupuestos
Las cuentas bancarias son herramientas financieras muy útiles que están diseñadas para ayudarnos a lograr diferentes propósitos financieros: Probablemente quiera tener una cuenta para transacciones frecuentes cómo pagar facturas y retirar efectivo; y quiera otra separada para acumular ahorros.
En todo caso le recomendamos consultar con su entidad, dado que muchos bancos ofrecen “bolsillos”, es decir, formas de separar su dinero en compartimientos previniendo así que se gaste de más en el día a día.
Si quiere separar gastos
Si tiene su propio negocio o tiene gastos comerciales regulares, tiene más sentido separar sus cuentas comerciales de sus cuentas personales. Ello le puede facilitar la deducción de gastos cuando los impuestos se acerquen además que si destina una cuenta propia para su emprendimiento esta ayuda a que sea más fácil evaluar el desempeño de sus actividades comerciales y el rumbo que toma su inversión.
Los topes de las cuentas
Este es una causa por la cual las personas tienen muchas cuentas, exceden el tope (que variará de acuerdo al tipo de cuenta y el banco que la ofrece). Dado que este límite se aplica a cada titular de cuenta en un banco determinado, puede asegurar cantidades mayores de depósitos si distribuye su dinero entre varios bancos.
¿Cuántas cuentas bancarias debo tener?
Es posible que se encuentre con una necesidad distinta de cuatro o cinco cuentas diferentes. Por ejemplo, puede tener:
- Una cuenta corriente para manejar los asuntos de sus negocio o si requiere poder pagar con cheques
- Una cuenta de ahorros para realizar sus operaciones diarias.
En Saber Más, Ser Más ya hablamos de las diferencias que existen entre estos dos tipos de cuentas, puede leer el artículo, aquí.
- Si está cerca a obtener la pensión también debería tener una cuenta para recibirla mes a mes.
- Un depósito electrónico o cuenta de ahorro de trámite simplificado: Para realizar operaciones de bajo costo y prácticas desde su celular.
Nuestro consejo es, solo abra y mantenga las cuentas que sean necesarias, y asegúrese que cada una de ellas tenga un propósito claro, de esa forma será más fácil el control y se ahorrará dinero en cuotas de manejo. En general, un equilibrio sería: una cuenta personal para realizar transacciones, un bolsillo o cuenta para ahorrar, y si es su caso una para su negocio.
¿Debería tener todas las cuentas con el mismo banco?
Puede ser conveniente y encontrar beneficios al tener todas sus cuentas en un solo banco:
- Tendrá un solo número de teléfono para llamar para todas sus necesidades de servicio al cliente.
- Si maneja sus cuentas en línea, necesitará de un solo inicio de sesión y una única app para administrar sus cuentas.
- Tener sus cuentas en el mismo banco facilita las transferencias de saldo entre cuentas.
Pero tampoco está mal elegir muchos bancos para sus cuentas, usted puede encontrar en el camino que, por ejemplo, hay un banco que le ofrece una cuenta corriente gratuita pero no tiene las mejores tasas cuando se habla de CDT. Andar de la mano con varios bancos puede ser una forma de “sacarle el jugo” a cada tipo de cuenta.
¿Es malo tener muchas cuentas bancarias?
La respuesta es no, siempre y cuando no le generen costos excesivos. Tenga en cuenta que debe estar revisando con regularidad todas sus cuentas y monitoreando sus finanzas; dado que los bancos cambiarán regularmente las tasas de interés, cuotas de manejo y tarifas.
Además, querrá asegurarse de que no se estén produciendo transacciones no autorizadas. No olvide que debe mantener sus propios registros de transacciones y comparar regularmente sus registros con los que tiene el banco.
Si llega a un punto en el que no puede seguir el ritmo de la supervisión de todas sus cuentas bancarias, puede ser una señal de que tiene demasiadas. Vea si hay alguna superposición en el uso que le da a algunas cuentas para poder combinarlas.
Continúe en Saber Más, Ser Más leyendo: ¿Compra en exceso? Tips para combatir la adicción a las compras.