El emprendimiento es un esfuerzo para hacer empresa, pero también una oportunidad para demostrar la capacidad de organizar y de tomar decisiones financieras acertadas.
Hacer un análisis de la idea del negocio
En este factor lo que prima es la creatividad. Es aconsejable que el potencial emprendedor se reúna con familiares y personas cercanas para exponerles su idea de negocio, en ese encuentro pueden surgir nuevas propuestas para fortalecer la idea.
Sondear las ideas en el mercado
El siguiente paso es buscar estudios acerca de la situación económica del sector empresarial donde piensa incursionar y analizar muy bien su competencia. También es necesario acercarse a testimonios de otros emprendedores para tener un concepto más cercano a la realidad del mercado.
Hacer un buen plan de negocios
Es necesario que el plan no solamente convenza al emprendedor, se sugiere ponerlo a disposición de entidades como la Cámara de Comercio de la ciudad donde resida, debido a que cuenta con profesionales y asesores que guían a los nuevos empresarios.
Buscar una red de contactos
Existen asociaciones empresariales y grupos de amigos que tienen disponibilidad y están buscando oportunidades de inversión y están dispuestos a convertirse en potenciales socios.
Créditos ajustados
En caso de requerir créditos, haga un análisis real para determinar cuánto dinero necesita, pues corre el riesgo de gastarse los recursos en cosas innecesarias si pide más, además tendrá problemas en el futuro para pagar la deuda.