Un choque, el daño al vehículo de un tercero, un robo, o hasta un infortunado accidente, son riesgos que corre al manejar y que en cualquier eventualidad, pueden resultar costosos. Tener asegurado el vehículo permite proteger los bienes propios y garantizar que ante un imprevisto, no se generen gastos excesivos, o en el peor de los casos, se gaste los ahorros que tiene destinados para cumplir sus metas.
Al adquirir un seguro, tenga en cuenta:
– En el momento de adquirir una póliza de seguro para su vehículo investigue y conozca las distintas coberturas que le ofrecen y el precio de cada una de ellas.
– Tenga claro que el costo del seguro varía según la aseguradora, la marca de su vehículo, el color, modelo, coberturas adicionales, entre otros aspectos.
– Confirme que el agente de seguros con el que está contratando esté autorizado y vigilado por la Superintendencia Financiera.
– Tómese el tiempo suficiente para leer el contrato de la póliza, analice los amparos y exclusiones a los que tiene derecho.
– Confirme que todos los datos de la póliza estén escritos correctamente, es decir: placa, nombre del asegurado, datos del automotor, suma asegurada y monto de la prima.
– Siempre tenga a mano los documentos del vehículo para que acredite la propiedad del mismo en caso que se presente algún accidente.
– Nunca pierda la calma ante un siniestro, siempre conserve la tranquilidad y llame de inmediato a la aseguradora para iniciar el proceso pertinente.