La investigación que se llevó a cabo en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, México, Panamá, Perú, Puerto Rico, República Dominicana y Venezuela, evidenció la necesidad de implementar y aplicar educación financiera en la vida de cada uno de los ciudadanos.Así mismo, hacer conciencia de que una planeación errónea de las finanzas, puede truncar o tardar el cumplimiento de muchos proyectos.
Para esto se hace necesario, tomar decisiones financieras sabias y entender la importancia de saber administrar el dinero en la vida cotidiana.
Educación financiera en Colombia
El estudio que realizó Master Card determinó que sólo el 15% de los jóvenes considera que su educación financiera es buena o excelente, mientras que un 13% considera que es mala o pésima.El 87% de los jóvenes encuestados manifestaron que su principal prioridad es tener unas finanzas personales estables.
En cuanto a las herramientas financieras que utilizan, el estudio estableció que la más común es abrir una cuenta de ahorros (62%), seguida de incrementar el saldo de su cuenta de ahorros (59%) y solicitar un crédito personal o de nómina (48%). En este sentido, comparando los resultados a nivel Latinoamérica y Colombia, se encuentra una leve diferencia en que los jóvenes están tomando conciencia de la importancia de ahorrar y planificar el futuro.
Sin embargo, persiste el compromiso de las entidades financieras y el Gobierno para que la educación financiera se convierta en un tema social y de moda, de manera que el índice de sobreendeudamiento se reduzca cada vez más.
Cuatro recomendaciones para que los jóvenes ahorren:
1. Empezar por crear un cojín financiero que le sirva en tiempos difíciles.
2. Ajustar su presupuesto y no gastar por impulso en cosas que son innecesarias y no le generan alguna productividad.
3. Asumir deudas que pueda pagar, no abusar de su tarjeta de crédito, no exceder su cupo o permitir que los intereses por mora consuman sus ingresos.
4. Invertir en algo que le pueda generar rentabilidad a mediano o largo plazo.
Ésta también es tarea de los padres:
– Tomarse el tiempo para sentarse con su hijo y enseñarle el costo económico de las cosas.
– Explicarle aspectos básicos y a la vez fundamentales: pago de arriendo, alimentación, lo importante del ahorro para la jubilación.
– Exponerle cada una de las responsabilidades a las que se ve expuesto al hacer uso de las tarjetas de crédito y al endeudarse, y explicarle los beneficios que éstas tienen.
-Hablarle sobre lo importante de un buen historial crediticio y qué son las centrales de riesgo.
– Estar pendiente de los hábitos de gastos de su hijo. Como padre sea conocedor de donde provienen los ingresos del mismo.