Diariamente los colombianos realizan miles de transacciones con sus tarjetas débito y crédito, desde pequeñas compras en transporte, hasta el mercado para el mes o tiquetes aéreos para vacaciones. Como vimos en el artículo ¿Cómo funcionan las tarjetas crédito y débito?, el dinero de cada compra que hacemos debe transferirse desde nuestra cuenta a la cuenta del negocio donde compramos; operativamente sería muy desgastante hacer esta operación para cada una de las miles de compras que se realizan diariamente.
Para solventar este problema nacen los “sistema de pago de bajo valor”, cuya función es acumular las distintas compras que se hacen a lo largo del día para de esa forma procesarlos rápidamente con una sola operación de traslado. Es decir, en lugar de tener que hacer diariamente miles de mini-traslados de dinero entre las cuentas de los colombianos, las compras se acumulan a lo largo del día y en un momento determinado se realiza el traslado de todo lo acumulado en un proceso llamado compensación.
¿Quién las administra?
En Colombia existe una clase de sociedades denominadas Entidades Administradoras de Sistemas de Pago de Bajo Valor, cuya actividad se encuentra regulada en el artículo 2.17.1.1.1 del Decreto 2555 de 2010, las cuales están sometidas a la inspección y vigilancia de esta Superintendencia por medio del Decreto 1400 de 2005. Su objeto principal consiste en la administración de sistemas que permiten la transferencia de fondos entre los participantes, mediante la recepción, el procesamiento, la transformación, la compensación y la liquidación de órdenes de transferencia y recaudo.
Acceso y uso de los sistemas de pago de bajo valor en Colombia
De acuerdo con algunas estimaciones el 86% de los pagos realizados en Colombia son efectuados por algunos de los sistemas de bajo valor, lo que quiere decir, que -710 millones están asociados al consumo de bienes y servicios, y solo el 14% son realizados por interacciones directas con el mercado financiero (Sistema de pago de alto valor).
Colombia cuenta con una amplia gama de sistemas de pago de bajo valor. Además del efectivo y los cheques, hay una variedad de sistemas basados en transferencias electrónicas de fondos. Veamos los más importantes en el siguiente diagrama:
Los sistemas de pago de bajo valor en Colombia – Banco de la República.
Por supuesto, el efectivo también hace parte del sistema de pago de bajo valor, puesto que, es fácil de usar, rápido en el momento de hacer el pago, ampliamente aceptado, y no requiere una validación centralizada. No obstante, el manejar efectivo tiene algunas complicaciones como: la falsificación del dinero y la seguridad de su manejo.
¿Cuál es el futuro?
Es necesario continuar sumando esfuerzos para lograr una transición efectiva hacia sistemas de pago de bajo valor más accesibles, eficientes y seguros, que redunden en una menor dependencia del efectivo. El desarrollo de los servicios transaccionales electrónicos son una oportunidad para aprovechar las nuevas tecnologías digitales y explotar las potenciales economías de red, propias de los sistemas de pago de bajo valor.