En un sentido práctico, una inversión no es más que poner a trabajar sus ahorros en algún tipo de actividad o negocio para que le generen mayores rentabilidades e implica resignar un beneficio inmediato por uno futuro. Usualmente las inversiones se hacen a través de la adquisición de un bien o un servicio que va a generar ingresos (como un taxi o un CDT, por ejemplo), o se va a apreciar en el futuro (una obra de arte, compra de metales preciosos como oro o plata). Las mejores inversiones son aquellas que combinan ambas variables; por ejemplo, al comprar un local usted genera ingresos y si eligió bien probablemente su valor sea mucho más alto a la hora de venderlo.
Tenga en cuenta que en las inversiones el dinero fluctúa con más intensidad y pueden o no dar utilidades. Antes de iniciar su vida como inversionista le proponemos que analice estos tres factores:
- Rendimiento esperado: qué tanto beneficio o utilidad espera por la inversión que realizará.
- Riesgo aceptado: qué tanto riesgo está dispuesto a correr para lograr el rendimiento esperado, tenga en cuenta que las inversiones más rentables suelen ser las más peligrosas, por lo que en caso de que las cosas vayan mal debe estar dispuesto a perder gran parte de su capital y que esto no represente el fin de su patrimonio económico.
- Horizonte temporal: es el periodo durante el que se mantendrá la inversión, puede ser de corto (hasta 1 año), mediano (de 1 a 3 años) o largo plazo (más de 3 años).